El gobernador logró pagar vencimientos con fondos propios y sin acudir a nueva emisión. Los índices de deuda son los más bajos en los últimos 9 años: «Nos permite defender la neuquinidad».
La gestión de Rolando Figueroa ha puesto el foco en la estabilidad financiera de Neuquén, priorizando la reducción de la deuda y el uso responsable de los recursos. A diferencia de administraciones anteriores, que recurrieron a financiamiento externo para cubrir obligaciones, el actual gobierno ha logrado afrontar vencimientos con fondos propios, evitando así compromisos que puedan afectar la autonomía provincial en el futuro.
Este enfoque no solo mejora la salud financiera de la provincia, sino que también fortalece su capacidad de inversión en áreas clave.
El descenso en los niveles de endeudamiento permite a Neuquén avanzar con mayor independencia en sus decisiones económicas. Con menos presión financiera, la provincia tiene margen para sostener programas de desarrollo productivo, infraestructura y bienestar social sin depender exclusivamente del gobierno nacional o del crédito internacional.
Esta situación es vista como un paso importante para garantizar la sustentabilidad del crecimiento económico y evitar los ciclos de endeudamiento que han afectado a otras jurisdicciones del país.







