Entre las productoras de este recurso, Rio Negro es la que menor participación tiene en la actividad. Por otra parte, Neuquén genera el doble de petróleo que el resto de provincias juntas.

Río Negro se ubica como la provincia con menor producción de petróleo entre las jurisdicciones que participan activamente en esta actividad en Argentina. A pesar de contar con yacimientos en explotación, su nivel de extracción representa solo una pequeña fracción del total nacional, lo que limita su influencia dentro del sector energético del país.

En contraste, la provincia de Neuquén lidera ampliamente la producción de petróleo gracias a la explotación intensiva de Vaca Muerta, una de las formaciones de hidrocarburos no convencionales más importantes del mundo. De hecho, Neuquén genera por sí sola el doble de petróleo que todas las demás provincias productoras combinadas, consolidando su rol como epicentro de la industria energética argentina.

Este panorama marca una diferencia significativa en el perfil económico y productivo de ambas provincias. Mientras Río Negro busca fortalecer su presencia energética con proyectos a futuro como el gas licuado, Neuquén ya cosecha los beneficios de una producción masiva y sostenida que impacta directamente en sus ingresos y desarrollo regional.