La Policía de la Ciudad interceptó a un sujeto que comercializaba teléfonos en una plaza del barrio de Flores. No pudo acreditar la procedencia de los dispositivos, que fueron secuestrados.

Durante una recorrida preventiva en el barrio porteño de Flores, efectivos de la Policía de la Ciudad detuvieron a un hombre que vendía celulares usados sin poder justificar su procedencia. El operativo tuvo lugar en el Barrio Rivadavia I, donde el sospechoso fue observado ofreciendo teléfonos en una plaza pública.

Al notar la presencia policial, el individuo intentó retirarse, pero fue interceptado a pocos metros del lugar. Al ser consultado por los uniformados, no logró presentar ninguna documentación que acreditara la propiedad de los aparatos ni explicar su origen de forma convincente.

Como resultado del procedimiento, se secuestraron 55 teléfonos de distintas marcas. El hombre quedó a disposición del Juzgado Criminal y Correccional Federal N.º 3, a cargo del Dr. Daniel Rafecas, por infracción a la Ley 25.891, que regula la comercialización de dispositivos móviles.

Las autoridades destacaron la importancia de este tipo de controles para prevenir el mercado ilegal de tecnología y desalentar la venta de bienes de posible origen ilícito. La investigación continuará para determinar si los teléfonos secuestrados están vinculados con denuncias por robo o extravío.