La ex boxeadora falleció por un accidente cerebrovascular. Especialistas del FLENI recordaron cuáles son los síntomas clave que requieren atención urgente y por qué actuar rápido puede salvar vidas o evitar secuelas graves.

La muerte de Alejandra “La Locomotora” Oliveras a causa de un accidente cerebrovascular (ACV) generó conmoción y renovó la importancia de reconocer sus síntomas a tiempo. En Argentina se registran cerca de 60.000 casos por año, y es una de las principales causas de muerte y discapacidad.

La doctora Virginia Pujol Lereis, neuróloga del FLENI, explicó que un ACV aparece de forma repentina y que “cada minuto cuenta”. Por eso, recomendó prestar atención a señales como pérdida de fuerza en la cara o un brazo, dificultad para hablar, problemas de visión, desequilibrio repentino o dolor de cabeza súbito sin causa aparente.

Los especialistas advierten que muchas personas minimizan estos síntomas y tardan en consultar, lo que puede derivar en daños irreversibles o incluso en la muerte. El neurólogo Pablo Ioli, presidente de la Sociedad Neurológica Argentina, insistió en que ante la mínima sospecha debe llamarse al servicio de emergencias.

Además de actuar rápido, la prevención es clave. Controlar la presión arterial, evitar el tabaquismo, mantener una dieta saludable, hacer actividad física y tratar enfermedades como la diabetes o el colesterol alto reduce significativamente el riesgo de sufrir un ACV.

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