La ex presidenta refuerza su protagonismo en la campaña de Fuerza Patria para garantizar la unidad del espacio. Grabois, Massa y Máximo Kirchner suenan como posibles candidatos.

Cristina Fernández de Kirchner volvió al centro de la escena política al intensificar su participación en la campaña del peronismo de cara a las elecciones provinciales del 7 de septiembre y las nacionales del 26 de octubre. Con el objetivo de sostener la unidad en Fuerza Patria, la ex presidenta interviene como figura articuladora en medio de una creciente disputa por los principales lugares en las listas legislativas.

El lunes se realizó una reunión clave en la sede del PJ nacional, en Matheu, que reunió a dirigentes de partidos, sindicatos y organizaciones sociales del frente bonaerense. Allí se definieron las líneas generales de campaña y se acordó difundir en todo el territorio el mensaje de Cristina, centrado en la crítica al modelo económico del gobierno de Javier Milei y en la necesidad de frenar sus políticas en el Congreso.

La pulseada interna por las candidaturas se agudiza: Juan Grabois presiona por un lugar relevante en las listas y mantiene un enfrentamiento con Sergio Massa, a quien acusó de representar a la “derecha peronista”. Massa, por su parte, se mantiene activo pero sin definir públicamente su futuro electoral, aunque prometió hablar con sus intendentes cercanos en los próximos días, tras un pedido del gobernador Axel Kicillof.

Otra figura con peso es Máximo Kirchner, presidente del PJ bonaerense, quien suena como posible cabeza de lista en octubre. Su candidatura no generaría resistencias internas y estaría supeditada a un eventual pedido de su madre, que continúa con prisión domiciliaria. Cristina Kirchner, mientras tanto, busca ordenar al espacio y evitar fracturas en la recta final antes del cierre de listas, en una etapa que se anticipa como decisiva para el futuro del peronismo.