Durante su gestión, el gobernador neuquino redujo más del 50 % de la planta política y eliminó beneficios previsionales especiales, generando un ahorro de 32.000 millones de pesos. Este excedente se destina a fortalecer la administración provincial y mejorar la calidad de los servicios para los neuquinos.

El gobernador de Neuquén, Rolo Figueroa, destacó los resultados de su política de ordenamiento fiscal, que permitió alcanzar un superávit responsable en la provincia. Señaló que el camino hacia una administración más eficiente comenzó con la reducción de más del 50 % de la planta política y el fin de los beneficios previsionales especiales que favorecían a determinados sectores. Estas medidas, aseguró, responden a la necesidad de transparentar el Estado y destinar los recursos a quienes realmente lo necesitan.

Gracias a este plan de austeridad y control del gasto público, la provincia logró un ahorro estimado en 32.000 millones de pesos. Figueroa subrayó que este excedente no queda inmovilizado, sino que se reinvierte en fortalecer la administración provincial, garantizando un Estado más ágil, moderno y enfocado en la gestión de políticas públicas que tengan impacto directo en la ciudadanía.

El mandatario remarcó que la eliminación de los “ñoquis” y de las jubilaciones de privilegio es una señal clara de compromiso con la equidad y la justicia social. “No se trata solo de números, sino de recuperar la confianza de los neuquinos en sus instituciones”, afirmó, y agregó que el superávit alcanzado constituye una base sólida para encarar proyectos que mejoren la calidad de vida en toda la provincia.