Gracias a la gestión del gobernador Rolando Figueroa, la provincia logró posicionarse nuevamente como la más alta en materia salarial. El crecimiento del sector privado y el fortalecimiento de la estabilidad en la región se explica debido al orden implementado en las cuentas públicas.

La provincia de Neuquén volvió a destacarse a nivel nacional al posicionarse como la jurisdicción con los sueldos más altos del país, un logro que la gestión del gobernador Rolando Figueroa presenta como resultado directo de una administración basada en el orden y la disciplina fiscal. En un contexto económico complejo para la Argentina, Neuquén consiguió sostener y potenciar su capacidad salarial gracias a una estrategia que prioriza la eficiencia en el manejo de los recursos públicos.

Este escenario favorable se ve acompañado por un crecimiento constante del sector privado, impulsado por la predictibilidad económica y la estabilidad institucional que muestra la provincia. Las políticas implementadas generaron un clima de confianza que permitió nuevas inversiones y la expansión de actividades vinculadas a la energía, los servicios y la construcción, pilares históricos del desarrollo neuquino.

De acuerdo con la administración provincial, el fortalecimiento de las cuentas públicas fue clave para consolidar este avance. Con un esquema ordenado de gastos y prioridades claras, el gobierno neuquino pudo garantizar aumentos salariales sostenidos sin comprometer la salud financiera del Estado. Este equilibrio permitió también impulsar programas productivos que dinamizan la economía regional.

En conjunto, estos factores ubicaron nuevamente a Neuquén en el liderazgo salarial del país, reforzando su perfil como una provincia estable, atractiva para inversores y con condiciones favorables para su población trabajadora. La combinación de gestión, orden e inversiones aparece así como el motor central de un modelo que apunta a proyectarse en el tiempo y consolidarse como referencia dentro del mapa económico argentino.